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Luca Montezemolo: "Schumacher dejó su ADN en Maranello"

Luca Cordero di Montezemolo, quien tuvo una estrecha relación con Schumacher, tanto laboral como personal, habla sobre él; como padre y como piloto.

( palabras)
Luca Montezemolo: "Schumacher dejó su ADN en Maranello"
Fuente imagen: Scuderia Ferrari

Durante estos días, marcados por el quincuagésimo cumpleaños del “Kaiser”, habló sobre él, entre muchas otras personas, Luca Cordero, el que fue presidente de Ferrari en la época en la que Schumacher consiguió 5 campeonatos del mundo de la categoría reina. Entre ellos, había una buena relación, “Schumi” no solo tenía contacto con el equipo italiano dentro de la pista, fue mucho más que un simple trabajo.

"Tal vez os sorprenda, pero lo primero que me viene a la mente sobre “Schumi”, no es sobre el piloto, sino sobre el hombre de familia. Mick, el segundo hijo, acababa de nacer, y todos los Schumacher vinieron a mi casa. Era verano, y por tanto época de mosquitos; cada 5 minutos Michael iba a comprobar como estaba su hijo y si le había picado alguno. Me llamó la atención la importancia que le daba a cada detalle. Con él, te dabas cuenta de que el más pequeño factor aún era fundamental. Parte del inmenso talento detrás del volante, creo que dejó un rastro en el ADN de Ferrari", comenta Luca.

No solo alaba lo que hizo como padre, también agregó la buena actitud que tenía siempre dentro del equipo: "Estaba a menudo en Maranello para las pruebas, que no estaban limitadas por aquel entonces, siempre iba a jugar al fútbol con los ingenieros y luego comía pizza, no intentaba demostrar nunca que había regresado al hotel a última hora o que había trabajado demasiado. En el apartamento que Enzo Ferrari había construido junto a la pista de Fiorano, también establecimos un gimnasio porque estaba obsesionado con la eficiencia física, por lo que creamos un garaje para su entrenamiento".

Pero no siempre fue así, antes de llegar al éxito, pasaron por situaciones complicadas, aunque eso afianzó más su relación y la confianza que ambos tenían: "Siempre fue coherente consigo mismo, incluso en momentos de dificultad, que no faltaron. Hoy en día recuerda con alegría las victorias, pero necesitó cinco años para triunfar. Hubo derrotas y controversias en el medio. Al menos dos veces, en 1997, después de colisión con Villeneuve y en 1998, después del incidente con Coulthard, en Bélgica… Nos bombardearon con ideas sobre despedirlo".

Al igual que Schumacher trabajó al cien por cien para el equipo de Maranello, ellos creyeron en él como piloto: "Confié en él y en Jean Todt, jefe del equipo, y, sobre todo, vi cómo Michael alentó el crecimiento de los jóvenes ingenieros, quienes aprendieron de él."

Esas dificultades hicieron que todos llegasen al 8 de octubre del 2000, juntos hicieron posible que el F1200 llegase a la línea de meta el primero, la estrategia y las manos de Michael Schumacher fueron la clave para superar al McLaren de Häkkinen: "Fue un momento histórico, hubo mucha ansiedad por el momento en el que no decidió entrar. "

Las alegrías continuaron muchos años, el trabajo por parte de todos siguió adelante, hasta Kimi Räikkönen, quien fue el último piloto en darle un campeonato del mundo de pilotos a Ferrari; en manos de Vettel está conseguir uno más.

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