La ingeniería ha superado al talento, y la máquina ha derrotado al hombre, podría ser el resumen de esta temporada, un tanto descafeinada de MotoGP. A falta de una carrera por disputarse, todos los focos ya están puestos en Pecco Bagnaia, que a no ser que ocurra un desastre absoluto, se convertirá en el nuevo campeón del mundo de la categoría reina. 

Fabio Quartararo ha sido el piloto que ha ocupado la primera posición de la general durante más carreras, pero al final no ha podido aguantar el pulso al gran dominio que ha demostrado Ducati. No solo en cuanto al número de motos bajo la misma marca, sino también a la gran potencia de la fábrica italiana. 

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— Monster Energy Yamaha MotoGP (@YamahaMotoGP) November 2, 2022

Pese a eso, el piloto francés aún no lo da todo por perdido: “Tuvimos una buena carrera en Malasia Realmente me divertí, y fue una gran sensación volver al podio otra vez. Ganar el campeonato es ahora muy complicado. Claro que daré mi 100%, como siempre, pero no me voy a estresar demasiado por el campeonato. Es el último gran premio de la temporada y quiero disfrutarlo y terminar con un buen resultado”, confirmó el francés. 

Lo cierto es que Quartararo tiene una dura misión, si quiere conseguir el título. Al francés solo le sirve la victoria y además tendría que esperar que Bagnaia no sumase ningún punto. Por otra parte, el circuito del Ricardo Tormo se adapta a la perfección a las peculiaridades de las Ducati y una buen muestra de ello, fue el podio que tilñeron de rojo la temporada pasada al terminar tres pilotos de la marca en los tres primeros. La victoria fue para Bagnaia, segundo Jorge Martín y el podio lo cerró Jack Miller. 

Por lo tanto, Fabio Quartararo tendrá que dar el 100% y esperar que ocurra un milagro para revalidar el título. 

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